En Táchira se usa para cuando alguien suelta una mentira descarada, una exageración tan gorda que nadie se la cree, pero igual da risa de lo ridícula que es. Es como adornar la historia hasta el absurdo solo para impresionar o salir del paso. Y hay que admitir que a veces esas camándulas son puro entretenimiento.
"Hermano, no te estés echando un camándula diciendo que Messi te escribió por WhatsApp para invitarte a jugar una pichanga en San Cristóbal."