Se usa cuando alguien se pone a exagerar todo, a meterle floritura barata a la historia y a inflar los detalles para quedar mejor o hacer el chisme más sabroso. Es como cuando el cuento era normalito y de pronto parece película de Hollywood. Muy tico, muy de barra de cantina, y la verdad es que tiene su gracia.

"Mae, ya te conozco, dejá de echar lingua, que al final solo fueron dos birras y un baile todo tieso, no esa novela que estás contando."

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!