Se usa cuando alguien se pela, se escapa o se esfuma para no enfrentar un problema, pagar algo o cumplir un compromiso. Es como si de pronto se hubiera ido a perder entre los cerros para que nadie lo encuentre. Suena muy de rancho y, la neta, tiene su encanto cuando lo sueltas en la plática.
"Al Chuy nomás le hablaron de que ya tocaba cooperar para la carne asada y el vato echó el monte, se desapareció como político en campaña después de las elecciones."