En el Meta se usa para hablar de una fiesta tan salvaje que te deja reventado varios días. No es solo que la rumba estuvo buena, es que se armó tan duro que quedas con guayabo físico y mental toda la semana. Es de esas parrandas que se recuerdan con risa nerviosa y un poquito de arrepentimiento.

"Parce, esa fiesta en la finca estuvo tan loca que dejamos una chiva tremenda, todavía el miércoles andábamos con la voz rota y el cuerpo vuelto nada."

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!