Se usa para hablar de alguien que cambia de postura o de bando según le convenga, dejando tirados a los demás sin mucha vergüenza. Es como ser chaquetero, pero en versión porteña, bien gráfica. En política, en la pega o entre amigos, cuando uno se vende rápido, todos dicen que dio vuelta la chaqueta. Y duele, pero tiene su gracia expresarlo así.
"El Nico juraba que odiaba el reguetón y ahora anda en el carrete cantando todos los temas de Bad Bunny, dio vuelta la chaqueta más rápido que micro en subida al cerro Alegre."