Se usa cuando alguien hace una llamada súper rápida y la corta en cuanto suena, solo para que le regresen la llamada y así no gastar saldo. Es la clásica maña de cuando andas bien roto pero con muchas ganas de chismear. Y hay que admitir que la técnica tiene su truco y su picardía.
"Oye, apenas sonó tu cel y ya colgaste, ¿otra vez andas dando el timbrazo porque no traes ni para la recarga, codo?"