Frase muy yucateca que se usa para decir que le metas velocidad a algo, que te apures y no te quedes pajareando. Es como decir acelera a tope, pero con sabor local y un poco de urgencia divertida. Suena a regaño cariñoso, aunque también se usa entre cuates cuando todo el mundo anda lento.
"¡Apúrale, Juanito, que ya va a empezar el partido y tú todavía buscando los tenis, dale sabucán que el América no te va a esperar!"