Forma muy cariñosa y un poco cursi de referirse a alguien especial, casi siempre la pareja, pero también puede ser tu crush o hasta tu mascota mimada. Es como decir bebé, pero subido de azúcar y con más ternura. Entre ecuatorianos suena juguetón y empalagoso, y hay que admitir que a veces hasta da risa de lo meloso que es.
"Oye, bebechito, cáete a la casa con una colita y unas papitas, vemos una peli y nos pegamos la vagueada del siglo en el sillón."