En Guárico se usa para hablar de un chisme bien sabroso que va rodando por todo el pueblo, lleno de detalles torcidos y medio venenosos. No es cualquier cuento, es ese rumor que pica, se enreda y deja a todo el mundo pendiente. Básicamente, cuando alguien suelta una culebrita, ya sabes que se viene salseo del bueno.
"Muchacha, si supieras la culebrita que me contaron del alcalde nuevo, hasta la señora de la panadería dejó de amasar para oír el chisme completo"