Expresión irónica muy usada para vacilar a alguien que va lentísimo haciendo algo, como si estuviera corriendo con la velocidad de una lapa, que es famosa por ser más lenta que cola de morrocoy. Sirve para meter presión con humor cuando un pana se tarda demasiado. Y hay que admitir que la imagen mental es buenísima.
"Chamo, tú sí corres como lapa, vale, apúrate con ese informe que el jefe ya tiene telarañas esperando tu vaina."