Se usa cuando te cruzas con alguien muy pijo, de estos que van planchados hasta las cejas, con ropa de marca y actitud de anuncio. No hace falta que haya choque literal, es más bien encontrarte de frente con un espécimen de postureo máximo. Y oye, a veces es como ver un documental de fauna urbana.
"Iba por Gran Vía medio sopa y casi me choco con un pijo con náuticos, jersey al cuello y gafas de sol aunque estuviera nublado, parecía influencer de manual."