Acción de parlotear sin cesar o hablar mucho sin decir nada importante, generalmente acompañado de gesticulaciones muy animadas.
"Dejá de chapalear tanto y decime qué fue lo que pasó con el perro del vecino."
En Nayarit chapalear es irse de fiesta con todo, sin miedo al ridículo y sudando la gota gorda en la pista. Es moverse tanto que parece que estás nadando entre charcos de sudor y cerveza, como si la noche fuera la última del universo. Y la neta, cuando se arma bien, hasta dan ganas de chapalearle también.
"No manches, llegamos al bailongo y el Chuy ya andaba chapaleando con la banda, empapado de sudor, dando vueltas como trompo y gritando que hoy se bebe hasta que amanezca"