En Tolima se usa cazuela para hablar de la siesta sabrosa que uno se pega después del almuerzo, cuando el cuerpo queda pesado y el calorcito da sueño. Es como decir que uno se cayó a la cazuela del sopor y quedó frito un ratico. No es vagancia, es tradición sagrada y el que la critica es porque nunca la ha disfrutado bien.

"Uy, con ese plato de lechona quedé doblado, me tiré una cazuela de hora y media y solo me despertó la bulla del vecino poniendo vallenato a todo taco."

En Mendoza se usa cazuela para hablar de situaciones intensas, medio caóticas, donde todo está mezclado y nadie entiende mucho qué pasa. Es como estar metido en un quilombo bien condimentado del que tenés que salir como puedas. A veces agota, pero también le pone picante a la vida, aunque uno termine medio frito.

"Che, ayer en el laburo fue una cazuela tremenda, se cayó el sistema, el jefe a los gritos y nosotros improvisando con mate en mano para que no explote todo."

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!