En el Maule se usa para decir que por fin entendiste qué está pasando de verdad, que pillaste el trasfondo de la situación y ya no te pasan gato por liebre. Es como cuando se te prende la ampolleta y ves la jugada completa. Muy de conversa entre amigos, con ese olfato medio detective que igual tiene su gracia.
"Estábamos en el asado y de repente caché la movida cuando vi al Pepe ayudando a lavar los platos sin que nadie le pidiera nada, ahí supe al tiro que andaba puro joteando a la prima."