Se usa cuando alguien se suelta a hablar sin freno y empieza a largar historias, chismes y detalles que nadie pidió. Es como destapar un barril de palabras que no se vuelve a cerrar. Muy de panas que se emocionan contando anécdotas de carretera, y hay que admitir que a veces es un show gratis.
"Marico, no le preguntes nada a tu tío que abre candungo y terminamos otra vez oyendo cómo casi se queda sin frenos bajando la Panamericana."