Se usa para decir que alguien es muy despistado o medio bobo para ciertas cosas, como si andara con los zapatos amarrados y no se diera cuenta. Es ese personaje que siempre se equivoca de hora, de lugar o de día. No es maldad, es pura torpeza tierna, y la verdad a veces da hasta risa verlo en acción.

"Parce, Camilo sí es muy zapatoca, llegó con uniforme al paseo de piscina y además se bajó en el pueblo equivocado todo tranquilo."

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!