En Venezuela se usa para hablar de una fiesta o plan que está buenísimo, con risas, música y desmadre del bueno. También puede referirse a alguien que echa broma y arma relajo sano. Es básicamente cuando la cosa está tan divertida que ni ves la hora pasar, y la resaca emocional vale la pena.
"Chamo, el vacilón en casa de Juan estuvo demasiado brutal, terminamos bailando salsa con la vecina y cantando gaitas a las tres de la mañana."
En La Guajira, un vacilón es una reunión sabrosa donde se arma la parranda con vallenato a todo volumen, ron, chisme, risas y baile hasta que amanece. No es cualquier fiestica, es de esas que se recuerdan por años. La gente se suelta, canta a grito herido y hasta termina arreglando el mundo entre trago y trago.
"Este fin de semana nos vamos pa' la ranchería a montar tremendo vacilón con acordeón, ron y baile hasta que salga el sol, así que alístate y no vayas a salir con que te quedaste dormido."
Una de esas salidas espontáneas con los amigos que empieza con una excusa cualquiera y termina en alguna parte aclarándote por qué estás trepado en un árbol a las 4 am.
"Ah, papá, anoche nos fuimos de vacilón y terminamos jugando fútbol descalzos en la cancha del barrio."