Expresión salteña para decir que alguien está comiendo o tomando con un hambre feroz, sin vergüenza y con mucha ansiedad, como si no hubiera comido en tres días. Se usa mucho en asados, peñas o juntadas familiares cuando uno se ensarta mal con la comida. Y sí, da un poco de risa verlo trazar así la mesa.
"En la juntada del finde, el Cholo estaba trazando como loco con las empanadas y el vino, la abuela le dijo que afloje porque ni los perros iban a probar una miga."