Expresión muy castiza para decir que alguien está en su mundo, con la cabeza a por uvas y cero conexión con la realidad. Es como estar empanado, ido o con la mente hecha puré, que te hablan y ni te enteras. Se usa mucho para colegas que van lentos procesando o están soñando despiertos. Y oye, a veces sienta bien desconectar.
"El profe soltó que había examen sorpresa y yo con una torrija mental pensando en las cañas de después, ni me enteré hasta que todos sacaron el boli."