Se usa en el norte de Chile para decir que alguien anda con rollos raros, preocupaciones escondidas o metido en cahuines que no quiere contar. Es como notar que la persona está inquieta, nerviosa o con cosas pendientes que le dan vueltas en la cabeza. No siempre es algo grave, pero sí huele a que hay drama guardado.
"La Javi anda más rara que nunca, no quiere salir, no contesta los mensajes y se ve toda tensa, fijo que tiene monos en el poncho con el pololo."