Se usa para hablar de alguien que tiene mucha habilidad para algo, pero cero ganas de ponerla en práctica. Es como decir que le sobra talento y le falta motivación, que podría romperla si quisiera, pero anda más flojo que wifi de plaza. Y hay que admitir que la frase tiene su mala leche, pero con cariño.
"El Seba tiene más dedos que interés para la guitarra, po weón, toca la raja pero prefiere quedarse scrolleando TikTok tirado en la cama todo el finde."