Se usa cuando algo se elige al aventón, sin pensarlo mucho ni hacer análisis intensos, casi como salga. La idea es que fue una decisión relajada, medio al azar, muy al estilo jarocho, con buena vibra y cero estrés. No es científico ni nada, pero oye, a veces así salen las mejores historias, aunque también los peores desastres.
"¿Y por qué rentaste ese depa tan lejos de todo? Pues la neta fue seleccionado a lo jarocho, vi el anuncio, me latió la foto y ya estaba firmando sin preguntar ni cuánto tardaba el camión."