Se usa cuando alguien te mete en un plan o compromiso sin preguntarte mucho, casi siempre aprovechándose de tu buena voluntad. Es como cuando ya decidieron por ti y tú ni enterado, pero igual te toca ir. Muy de familia, amigos o jefes que te cargan cosas de más, y hay que admitir que a veces da risa de lo descarado.
"La profe me puso en la olla para organizar la rifa del Día de la Madre y yo solo quería ir a comer buñuelos y chorizo en la cafetería del barrio."