Expresión muy usada en Durango para decir que alguien se fue de fiesta con todo, sin frenos y con alcohol hasta en las pestañas. Cuando alguien pega azul, sabes que al día siguiente va a andar destruido, con resaca brutal, cara de zombie y arrepintiéndose de todas las decisiones de la noche. Y aun así, luego lo vuelve a hacer.
"No manches, el Chuy pegó azul en la feria de Durango, salió abrazando al mariachi y hoy anda tirado en la cama viendo novelas porque no puede ni con su alma."