Expresión cordobesa que se usa cuando a alguien finalmente se le prende la lamparita y entiende algo que tenía delante de la cara hace rato. Es ese momento en que el cerebro hace clic y caés en la cuenta de un chiste, una indirecta o un detalle obvio. Y sí, suele pasar tarde y da un poco de vergüencita.
"Estaba en el bondi pensando cualquier cosa y de golpe me ocurrió la teja de que había mandado el audio hot al grupo de la familia, casi me tiro por la ventanilla del cagazo."