Se usa para esa persona que llega a la rumba y se queda casi fija en un punto, como si fuera un mueble con flow propio. No anda correteando por toda la fiesta, pero tiene tanta pinta y tanta labia que todo el mundo termina pasando por su esquina. Es como ser mueble, pero mueble protagonista, y la verdad tiene su encanto.
"Nicole es una moberita total, llegó a la rumba, se parqueó al lado de la bocina con su vaso en la mano y desde ahí controla el chisme, los saludos y hasta quién se gana el último trago del combo."