Se usa para hablar de alguien con un hambre brutal, de esos que ves y piensas que se podrían comer hasta las servilletas. Es el compa que llega a la carne asada y no perdona ni el chorizo quemado. No es insulto, más bien burla cariñosa para el tragón oficial del grupo, y la neta casi siempre hace reír.
"Ya escondan las gringas y los tacos de suadero, que ahí viene el Toño hecho lobo hambriento y nos deja sin cena otra vez"