Expresión costeña para hablar de esa persona que no se calla ni debajo del agua, que habla y habla sin freno y se lleva por delante cualquier conversación. Es como tener una licuadora en la sala, todo el tiempo sonando. A veces hace gracia, pero también puede cansar un montón si uno solo quiere estar chill.
"Parce, invitar a Estela fue un error, esa mujer es la máquina de moler, no dejó hablar ni al DJ y terminó contando hasta el chisme del vecino del quinto"