En Nariño se dice que alguien está vendido cuando ya no tiene cómo zafarse de un problema, está pillado y sin salida, casi que con la soga al cuello. Es como si ya hubiera entregado el alma y no quedara más que aguantar el chaparrón. Suena dramático, pero hay que admitir que tiene su gracia trágica.
"Parce, Juan está re vendido si no entrega ese trabajo hoy, el jefe ya le echó el ojo y fijo mañana le están diciendo que muchas gracias por los servicios prestados."