Se usa cuando alguien está muy cabreado, tan mosqueado que casi le salen chispas de la cabeza. No es solo enfado normal, es ese punto en que cualquier cosa más y explota. Es una forma muy gráfica de decir que la persona está a punto de soltar bronca épica, y la verdad es que la imagen hace bastante gracia.
"Cuando Pep vio el coche rayado, estaba que trina, soltando tacos en catalán y castellano mezclados mientras los vecinos miraban desde el balcón flipando en colores."