Se usa cuando el frío te pega tan fuerte que te encoges todo, como hecho un bollito, tratando de conservar el calor. Es ese estado en que estás tiritando, con las manos duras y la cara roja, y solo querés meterte bajo mil frazadas. Muy de clima extremo, y la verdad es que suena hasta tierno.

"Amigo, anoche se largó el viento blanco y yo en la parada del bondi sin gorro ni nada, terminé todo amuñonado abrazado al termo como pingüino friolento."

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