Se usa cuando alguien hace algo con actitud, gracia y buena vibra, aunque no sea experto ni de lejos. Es como decir que le pone flow, que no se raja y lo hace con confianza y buen humor. A veces sale bien, a veces sale un desastre, pero mínimo se ve que le echó estilo, y eso siempre se agradece.
"El vato no sabía ni prender la parrilla, pero le echó estilo, armó la carnita asada en el patio y todos en Durango terminaron bien contentos y medio pedos."