Se usa cuando alguien decide ponerse las pilas y vender todos los tiliches que tiene arrumbados en la casa. Es como hacer limpieza extrema pero con intención de sacar dinerito de todo, desde la licuadora chimuela hasta el patito roto. Básicamente es vaciar el tiradero y convertir la chatarra en billetes, lo cual siempre anima.
"Ya viene la quincena y ando bien tronado, así que este sábado voy a echar el tilichero en el patio, a ver quién me compra la tele gorda, el ventilador cojo y hasta la caminadora que solo usó mi tía dos días."