Se usa para decir que alguien se pone a chismear sabroso, contando rumores, detalles picantes y cosas medio exageradas. Es como sentarse a actualizar el radiopasillo con todo y producción especial. No siempre es malintencionado, pero sí bien metiche. Y la neta, a veces hasta se disfruta aunque uno finja que no.
"Ya vi a la tía Lucha y a la vecina en la banqueta echando el perico, seguro en cinco minutos ya saben hasta de qué color trae los calzones medio edificio."