Frase utilizada para pedirle a alguien que deje de ser impaciente o entrometido, sugiriéndole que se calme y deje de molestar.

"¡Oye, deja el rabo quieto y espera a que termine mi turno en el billar, que no me desconcentres!"

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!