Se usa cuando alguien dice que va a hacer algo pero en el fondo sabe que ni de vainas va a pasar. Es como prometerse madrugar, hacer ejercicio o dejar el guaro, pero con cero compromiso real. Suena medio optimista, pero en realidad es pura pereza disfrazada de esperanza, y por eso hace tanta gracia.

"¿Va a ir al gimnasio a las 5 de la mañana? Creeré, mijo, si apenas me levanto es a apagar la alarma y seguir roncando como oso."

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!