Se usa para bardear a alguien que tiene un corte de pelo horrible, desparejo, hecho a las apuradas y sin una gota de cariño. Es como decir que parece que un perro le hubiera mordisqueado la cabeza en vez de pasarle la tijera. Es medio cruel, pero hay que admitir que la imagen es tan gráfica que da risa.
"Boludo, ¿quién te peló, tu primo con una tijera de cocina? Estás cortado de perro mal, mañana caé a la peluquería porque así no te salva ni la gorra."