Se usa para contestar con ironía cuando alguien dice algo que es más que evidente, como remarcar que la cosa canta por sí sola. Es una forma de decir que sí, pero con un toque de burla suave, como quien piensa que la pregunta sobra un poco aunque le haga gracia.
"—Hermano, ¿tú crees que hace calor con este sol pegando así? —Claro claro, y si te quedas ahí quieto te fríes como plátano maduro."