Expresión muy de patio panameño para cuando ves que la bebida no va a alcanzar ni de broma. Es básicamente echarle agua a la chicha o al trago para que rinda más y nadie se quede mirando el vaso vacío. Es medio truco, medio tradición, y la verdad es que a veces salva la fiesta.
"Manito, esta chicha no va a alcanzar, mejor rendimos la chicha antes que lleguen todos esos tragones del barrio."