Expresión bien tucumana que se usa cuando alguien anda chusmeando fuerte, contando secretos ajenos y agrandando todo para que el chisme pique más. Es como mezclar radio pasillo con novela mexicana y un toque de mala leche. No siempre es maldad pura, pero sí es meter bocado donde no te llamaron, y hay que admitir que a veces entretiene.
"Che, dejá de cantar lata, que ya todo el barrio sabe que me quedé dormido en el baño del boliche y mi vieja casi me mata cuando se enteró."