Se dice cuando alguien anda bien embobado por otra persona, como hechizado, encandilado o con la cabeza en las nubes. Es ese modo enamorado en el que todo te da igual y nomás piensas en ella o en él. Muy de andar de menso, pero qué le hacemos, así pega el amor.
"Desde que vio a Lupita en la feria, Joaquín anda engatusado y ni oyó cuando le gritaron que dejó la troca abierta con las llaves pegadas."