Se usa para hablar de alguien que se hace el vivo, que va por la vida avivado, queriendo sacar ventaja o mandarse cagadas con picardía. No es solo buscar aventuras, es más bien hacerse el canchero y jugar al límite. A veces sale bien y todos se ríen, y otras termina siendo un papelón hermoso.
"Ese Juan siempre anda de vivos, el otro día se hizo pasar por DJ en un casamiento ajeno solo para morfar gratis y terminar bailando arriba de la mesa."