Se usa cuando alguien anda cagado de hambre y solo come puras cositas mínimas para aguantar, como galletas, pan duro o lo que pille. Es como vivir a punta de picoteos miserables mientras esperas que llegue la plata o una comida decente. Bien de estudiante muerto de hambre, pero con su toque chistoso igual.
"Hermano, quedé pato después del finde largo, así que esta semana ando a puros chochitos con las galletas del casino y el pan añejo que dejó mi vieja."