Se usa para hablar de un señor mayor que sigue teniendo su encanto, su picardía y un algo que llama la atención. No es solo que dé buenos consejos, es que tiene flow, baila rico, se viste con estilo y hasta coquetea un poco. Es medio halago medio chiste, y hay que admitir que cuando aplica, aplica durísimo.
"Mira a ese viejo sabroso bailando salsa con la chama del vestido rojo, tiene más swing que todos los pelados del barrio juntos."