Se usa para bajarle un poco los humos a alguien que se cree más capo de lo que es. Básicamente le estás diciendo que todavía le falta experiencia, calle y práctica para llegar al nivel que presume. Es medio bardero pero con cariño, como recordarle que recién está empezando a asomar la nariz al mundo.
"El pibe tiró un truco re confiado, se quiso hacer el vivo en la mesa y mi viejo se le cagó de risa: Todavía te falta sopa, nene, primero aprendé a contar las cartas."