Se usa en Ayacucho para hablar de alguien medio loquito, distraído o que siempre anda haciendo tonterías que dan risa. Puede sonar cariñoso o un poco burlón, según el tono y la confianza. Es como decir que la persona está algo chiflada, pero con ese toque de barrio que la hace más entrañable que peligrosa.
"Oye, ese tío chalay se fue al mercado sin plata, volvió, se olvidó por qué volvió y encima perdió el celular en la combi, ya parece chiste su vida."