En Misiones se dice sonar la canilla cuando alguien anda chusmeando fuerte y haciendo correr un rumor por todo el barrio. Es como abrir la canilla del chisme y dejar que el agua salga a lo loco, sin filtro y sin pausa. Suele usarse cuando una persona exagera, mete cizaña o no puede cerrar la boca ni a palos.
"Che, dejá de sonar la canilla con lo de mi ex, que ya todo el barrio sabe el chusmerío y la mitad es puro verso tuyo."