En Chile se usa para hablar de un niño pequeño, pero también para decir que alguien se comporta de forma inmadura, majadero o medio latero. Es como decir que anda con pataletas o que no asume responsabilidades. Suena medio tierno, pero también es un tirón de orejas con harta chispa chilena.
"Oye, deja de ser un cabro chico, tenís treinta años y todavía le pedís plata a tu mamá pa' salir a carretear todos los fines de semana."