Se usa cuando alguien está echando una mentira tan gorda que nadie con dos dedos de frente se la cree. La imagen es la de un tigre rugiendo en un guadual, algo rarísimo y fuera de lugar, igualito que el cuento exagerado que están soltando. Es como decir que está hablando pura carreta, pero con más sabor campesino.
"Ahí va Pedro otra vez diciendo que casi se casa con una reina del carnaval de Neiva, ese man solo está rugiendo en el guadual para ver quién le para bolas."