Se usa cuando alguien está re colgado, en la luna total, y de golpe vuelve al presente y se aviva. Es como decirle que deje de flashearla y ponga los pies en la tierra, que preste atención a lo que pasa alrededor. Muy de bardear con cariño al amigo que se pierde en su propia estratosfera mental.
"Che, Juancho, dejá de mirar a la nada y recogé el vuelo, que ya se queman los choris y el asado está casi listo, hermano."